jueves, 31 de mayo de 2012

"Secretos de un seductor" de David del Bass



Hoy os voy a hablar de un libro que ha llegado hasta mí. Su título es ya de por sí sugerente y atractivo: “Secretos de un Seductor” de David del Bass, donde se narra, en forma autobiográfica y a modo de diario sus progresos en el mundo de la seducción, dando un extenso número de consejos para ser el mejor en dicho terreno, algo difícil y fangoso para algunos.
El escepticismo se apoderó de mí de inmediato: ¿Acaso un hombre había descubierto la llave de nuestra caja de Pandora? ¿Podía ser que no fuéramos las mujeres más que seres previsibles como para que alguien nos pudiera encajonar dentro de unas tasadas conductas?
Se agolparon en mi mente imágenes de seductores o aspirantes a seductores que de una u otra forma habían aparecido en mi vida llegando a la conclusión de que los buenos, realmente buenos se podían contar perfectamente con los dedos de una mano. Predominaba la mediocridad, “¿el estudias o trabajas?”, el “hola, ¿qué haces tú tan sola por aquí?” y otros métodos del estilo. Se distingue de lejos al buen seductor, es una forma de mirar, de caminar y de gesticular, da igual si es innato o si ha pasado por un largo proceso de aprendizaje. Intuimos que nos va a llevar por su camino, y aunque él piense que casi todo ha sido fruto de su trabajo, no lo es, nos gusta que nos seduzcan, nos excita la sola presencia del buen seductor a nuestro lado y facilitamos su labor para que todo sea acorde él había previsto. Él triunfa, pero nosotras también, hemos conseguido lo que en ese momento queríamos, un hombre que sabe lo que quiere, que no tiene pudor en acercarse a nosotras, que no te pide perdón por besarte y menos por llevarte a la cama.
Antes de abrir el libro, me acordé de los clásicos, ¿sería el protagonista del libro alguien parecido al apasionado y sexual Casanova amante de las mujeres? ¿O quizás sería más parecido al Don Juan de siempre, al que yo recuerdo más como al Don Giovanni del libreto de Da Ponte que al Don Juan de Zorrilla? Don Giovanni realmente despreciaba a las mujeres, no tenía reparos en hacerlas sufrir, en llegar incluso a la violación en caso de que alguna se le resistiera. Su misoginia y seguramente algún problema mental eran más que evidentes.
La duda me atenazaba así que cogí el libro y comencé a leerlo. Se suponía que era un libro destinado al sector masculino, así que yo entré en él con la curiosidad de una fisgona que intenta descubrir lo que hay al otro lado de la puerta. La mirilla era en este caso amplia y con buenas vistas, y el paisaje que se divisaba comenzó a encandilarme.
Porque David va lentamente desgranando sus secretos, sabe que ha de ir con mesura y no precipitarse para así enganchar al lector y animarle a seguir leyendo. Sus primeros pasos en el mundo de la seducción, los errores más frecuentes que se cometen y por fin, todos los detalles para ser un perfecto seductor. No era Don Giovanni, ni Don Juan, era David con toda su artillería para conseguir una nueva amante.
Y los consejos son buenos, quizás algunos evidentes o más que evidentes para nosotras, las mujeres, en este caso el bando contrario. Huyo como de la peste de los hombres que se apoyan en la barra del bar calculando cuál va a ser su nueva presa, del brazo en el hombro, de que invadan mi espacio de forma inadecuada, de que me descubran todo de su personalidad y se desnuden con su palabrería antes de tiempo. Me gusta que el hombre sepa lo que quiere en todo momento, que me intrigue, que me haga reír pero que no sea el típico pesado que cuenta chistes hasta la extenuación, quizás pase un buen rato con él pero jamás conseguirá llevarme a la cama.
Leyendo el libro me he imaginado cuál sería mi reacción ante los distintos ataques, tanto de los malos seductores, hombres que realmente no conocen el significado en profundidad de la palabra “seducir”, borde y fría hasta el extremo, como de los buenos seductores, aquellos a los que me he rendido y con los que he tenido más de una aventura…Pero eso lo dejaremos para otra ocasión, ¿otro relato de Alice Carroll quizás?
Recomendable y fácil lectura para este verano que ya nos comienza a acariciar, para pasar un buen rato, y muy útil para aquellos que quieren progresar como seductores. No sólo deberían leerlo los hombres, aconsejo a las mujeres que también lo hagan, es de vital importancia conocer al enemigo, que se preparen para los nuevos abordajes, y que disfruten de aquellos más avezados que han sabido conquistarlas y llevarlas donde ellos…y ellas querían.

Podéis encontrar mucho más sobre el autor y su libro en su blog: Seducción y Superación, donde tendréis la oportunidad de leer algunos capítulos de “Sueños de un seductor” así como de su nuevo trabajo “Seducción Élite”. David se define a sí mismo como un chico normal que aprovecha cualquier momento para conocer mujeres. En 2007 comenzó a estudiar sobre el mundo de la seducción y en 2008 empezó a impartir en Madrid talleres sobre seducción. Podéis preguntarle en su blog cualquier duda sobre el tema que él sin duda os responderá y orientará sobre este apasionante mundo.